Golpe a la Democracia en la Escuela de Arte de Albacete.

Artículo de prensa en "La tribuna de Albacete": "Arbitrariedades antidemocráticas del Delegado de Educación socialista, Diego Pérez González, en sus actuaciones en la Escuela de Arte de Albacete (22-6-2011)". "LA TRIBUNA DE ALBACETE". Opinión. 22/06/2011. Tribuna libre. ¡Viva la Escuela de Arte!

El proceso de elección de director de la Escuela de Arte (EA) de Albacete ha sido la culminación del despropósito con el que el actual delegado provincial de Educación, Diego Pérez, se va a despedir de su cargo. Sin hacer caso de los asesores del Servicio de Inspección, ha optado por nombrar a dedo a uno de los dos candidatos. El proceso de elección comenzó con el Claustro preceptivo en el que se elegía la Comisión para valorar y proponer a uno de los dos candidatos. El número de miembros a elegir era de cuatro vocales. En ese Claustro salió elegida una comisión que representaba el sentir del Claustro, de acuerdo con la representación democrática que se supone debe tener todo acto de esta naturaleza.

Este Claustro fue recurrido por el sector de profesores que apoyan a Pedro Blasco (uno de los candidatos) porque, según ellos, la votación para elegir la comisión debía de hacerse por mayoría simple. A nuestro entender, no era representativo ya que los grupos están en una correlación de 19 para Pedro Blasco y 16 para Felisa Giménez, la otra candidata. Para que nos entendamos, es como si un partido saca un voto más que otro en unas Elecciones Generales y se lleva todos los diputados.

El director del centro propuso un sistema de votación representativo (2/3). La forma de la mayoría simple les proporcionaba todos los miembros de la Comisión para su candidato, Pedro Blasco. El delegado provincial atendió su reclamación y al día siguiente ya había enviado la orden de anulación de ese Claustro, proponiendo que la elección de candidatos a la Comisión se realizase en otro Claustro de acuerdo a una votación por mayoría simple. En resumen: los cuatro candidatos de la comisión serían a favor de Pedro Blasco, «su amigo»; sin olvidar que la comisión anteriormente elegida se había constituido legalmente y además estuvo presidida por el inspector de educación del centro, que no puso ningún reparo a este hecho. Actualmente este inspector, junto a tres miembros de dicha comisión, presentó su dimisión al tener conocimiento de la orden del delegado.

Las actuaciones del delegado con respecto a la EA creemos que han sido guiadas por la presión del colectivo que apoya a Pedro Blasco, y con ayuda de algunos sindicatos, mayoritariamente ANPE, al que parece ser que el delegado provincial le tiene «mucho miedo» y se siente presionado.

El actual equipo directivo de la EA ha enviado los correspondientes informes a los servicios de inspección e incluso al mismo delegado, sobre la actuación de algunos los profesores de este grupo. Informes que no han obtenido respuesta y tales como mobbing a profesores, que no apoyan su punto de vista, desacato al director en sesiones de Claustro, desacreditación a compañeros ante algunos alumnos, utilizar sus horas de clase para hacer campaña electoral, la necesidad de que la jefa de estudios tenga que asistir a las reuniones del Departamento en el que un profesor está acosado.

Todos estos hechos han sido pasados por alto, tanto por los servicios de Inspección como por el propio delegado, y su actuación ha sido nombrar a su amigo Pedro Blasco, ignorando al sector de Bachillerato de la EA, el Consejo Escolar, la Comisión constituida para elección de director, el equipo directivo, el servicio de inspección, a la otra candidata (¿será por qué es mujer?).

A cambio tenemos el nombramiento de un director que ha fomentado la «queja por la queja», ha apadrinado la controversia y el «de qué se trata, que yo me opongo», adalid de un grupo de profesores, jóvenes, con poca experiencia docente, y que parece ser que han dado clase en las mejores instituciones del mundo y que, sin los mejores medios posibles, no pueden desarrollar su tarea docente. Los demás hemos tenido que apechugar con situaciones en las que había tres alumnos por ordenador, no había desdobles, clases de 45 alumnos, impartíamos más de 21 horas semanales, menos sueldo, menos prebendas... A este grupo elitista de la enseñanza les hubiera sido imposible dar clase y posiblemente hubieran renunciado a un puesto de trabajo tan «indigno».

Resaltamos la situación que se va a crear en la EA a partir del próximo curso por culpa del «ninguneo» del delegado provincial saliente a un sector importante del Claustro y tomar una decisión unilateral, caprichosa y sectaria por miedo a algunos sindicatos y profesores que, a nuestro entender, se mueven por el interés personal de conseguir plazas y estabilidad en la EA, estando cinco de ellos con destino en otros centros, y trabajando aquí gracias a sus comisiones de servicio que con tumulto y presión consiguieron en Toledo y que el actual delegado parece ser que pretende prorrogar sin causa justa.

Este derecho al pataleo, puesto que nuestra Administración no nos ampara, queremos ponerlo en conocimiento de la sociedad albaceteña y de los nuevos rectores de la educación en la región, para que se defienda la razón de las cosas y no la razón de la fuerza y la coacción. ¡Viva la EA!

* José R. Estrada Campayo y 15 más / DOCENTES DE LA ESCUELA DE ARTE.